Pensé que podía ser sobre cocinar en casa. Te comparto estas tres preguntas:
- En casa mi esposo gusta de pedir comida a domicilio y me preocupa el aspecto nutritivo ´¿Qué debemos considerar al pedir a domicilio para no consumir calorías de más?
Recomendaciones de cómo escoger una mejor comida sin tanto contenido de grasa.
Pedir comida a domicilio puede convertirse disyuntiva cuando se trata de querer cuidarte pero a la vez no cocinar. Conciliar con los demás, si no vives solo y que la decisión que elijas tenga un valor nutricional lo suficientemente adecuado que alimente y un sabor que guste, con bajo contenido en grasa y azúcar que no afecte el peso corporal, el sabor que sea agradable al paladar y mantener la armonía familiar.
Compensar esto es un malabarismo. Depende de lo que se quiera comer lo único que puedo decir es que se debe tomar una buena decisión para que no represente un factor de estrés que genere culpa y discordia cuando el pedido es compartido porque habrá afectaciones.
En caso de conciliar el pedido de comida a domicilio tenga presente:
- Procure que el pedido a domicilio coincida con los horarios de comida caseros.
- Mantenga horarios de comida estables para todos en casa.
- Evite saltar las comidas durante el día así no tendrá hambre voraz cuando haga el pedido a domicilio.
- Evitar pedir preparaciones agrandadas
- Especificar que las salsas o aderezos vengan aparte.
- Preferir preparaciones sudadas, al horno, plancha o asadas pero no carbonizadas ni fritas.
- Llegar a un acuerdo de pedir una sola preparación que guste a todos ejemplo la proteína (pollo con chimichurri) y preparar en casa los complementos que componen el balance de una comida variada ejemplo: papas al horno o cocidas y la ensalada. Esta decisión además de bajar el contenido de la grasa de la comida se economiza en la compra.
- Si está llevando un plan de alimentación o dieta con porciones pero además quiere ser parte de festín del domicilio, procure sacar ideas de su lista de comidas que usted no se sienta fuera si le genera aprehensión no poder participar.
En realidad va a depender del menú escogido en el domicilio, puede que haya elecciones que no tienen remedio, si o si son grasosas o azucaradas, no hay nada que hacer, tratar de engañarse con que el caramelo es de dieta es solo una falacia, lo importante es asumir la responsabilidad o tomar la decisión sobre la base de la meta u objetivo que deseas o no para cuidar tu salud o alimentar tu emoción.
- Cocinar todos los días puede ser monótono ¿qué sugerencia puede dar para salir de la rutina y que todos quieran comer?
Dejar de comer no es una opción, por más ayuno que practiques habrá que comer en algún momento. Si no te gusta cocinar, te falta creatividad o no has dispuesto del tiempo para integrar esta actividad diaria como parte de tu autocuidado, te comento que sería bueno que comiences por elaborar un plan de acción que permita ir incorporando la alimentación a tu vida.
Mi frase es “El que cocina tiene poder” y verás que tienes el poder de decidir lo que otros van a consumir los demás, tienes el control de la alimentación de los que están bajo tu responsabilidad, el poder de economizar, es una manera muy sutil de llevar las riendas de la casa. Usa bien el poder de cocinar porque realmente genera resultados maravillosos cuando se gestiona para el propósito de darle a tu cuerpo lo que le beneficia, el acto más espiritual que puedas tener contigo es hacer del alimento el mejor regalo para tu cuerpo y que los resultados se vean reflejados en tu bienestar.
Algunas tácticas que pueden ayudarte a simplificar el “trabajo de la cocina” es reutilizar comidas y transformarlas en otras preparaciones, por ejemplo: si hoy hiciste un pollo al horno y papas cocidas, puede que haya sobrado pollo y lo deshilaches y prepares un molde de papas (papas cocidas las majas y sale un puré de papas ) pones en un recipiente una capa de puré de papas y añades el pollo y le pones la otra capa de puré de papas y será un molde de papas relleno con pollo .
Preparar alimentos y congelar en porciones servirá para simplificar el tiempo. Ejemplo puede que cocines un zapallo y lo congeles (en bolsitas) dividido en porciones listas para preparar con el sabor que quieras darle. Cocinar granos, es una opción preparar una libra y luego que están listo ponerlos en bolsitas o en cubos de hielo y así los consumes al ritmo que quieras y la cantidad suficiente que no desperdicies ni te canses de comer lo mismo. Pedir el pollo en presas para que descongeles solo lo que vas a cocinar y no desperdiciar o descongelar innecesariamente.
Quizás de lo que pides a domicilio queden sobras, puede que eso complemente tus comidas en la siguiente comida o al día siguiente y tienes fusión de comida de un domicilio y una preparación casera.
No tienes que ser un experto, ni ceder a las críticas, ni tampoco te sientas avergonzado por no saber o molesto por no gustarte cocinar pero debes saber que una cosa si es segura, tienes que comer y quizás tengas una mala relación con la comida a consecuencia de una mala gestión durante la infancia que rompió con un ritual que se hará de por vida. Has las pases con la comida y disfrútala, conviértela en el mayor de los placeres por los beneficios que genera al “COMER”.