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Ayuno intermitente

  1. Para empezar, ¿qué es el ayuno intermitente?

En el ayuno intermitente (AI) podría decirse que es un tratamiento para pérdida de peso, tiene el objetivo de pasar un determinado periodo de tiempo sin recibir alimentos proveniente de la alimentación con la intención que el cuerpo utilice las reservas de energía (glucógeno muscular y hepático), reservas de masa muscular (aminoácidos ramificados) y de grasa corporal (tejido adiposo) , para dar respuesta a las necesidades y de esta forma estimular la pérdida de peso a través de mecanismos que poseemos y que al cabo de pocos días se van activando para llegar a la oxidación de las grasas pasando por que la glucogenólisis.

En realidad es un mecanismo del que naturalmente dispone el organismo como reacción para dar respuesta a la falta de alimentos y las necesidades nutricionales, de esa manera el cuerpo continúa sus funciones de forma limitada pero asegurándose de perpetuar la supervivencia de la raza humana.
Viajemos un poco al tiempo de las cavernas, en una era en que el hombre era nómada y debía recorrer distancias en busca de alimentos y comer cuando cazaba para luego pasar tiempo sin comer. Aquí inicia el proceso de ayuno intermitente, al que la memoria corporal identifica en estados de supervivencia, en necesidad de alimento, crisis, guerras, cambios de clima, etc.
Cuando se necesita hacer un examen de laboratorio, cirugía o procedimiento que requiere estar en ayuno, el cuerpo se prepara para dar respuesta a esa falta de nutrientes al que se enfrenta por un determinado periodo de tiempo. Existen otras razones para las que se dispone ayuno como: religiosas, rituales, introspección espiritual, agradecimiento, etc.

  1. ¿Por qué se ha vuelto tan popular?

El método como disciplina genera una cierta forma de encanto, en mi experiencia profesional veo muchas personas practicando ayuno pero como un patrón a la carrera por la falta de tiempo y de organización diaria de las comidas. Porque la mayoría de las personas no tienen horarios de comidas adecuados ni constantes. Pero dejar de comer sobretodo en horarios de la mañana y extender el ayuno hasta por 18 horas desde la última comida de la tarde, genera una especie de solución por las mañanas, y una ingesta copiosa en la cena, la mayoría refiere tener hambre más en la cena pero justamente es debido al consumo nocturno y el ayuno matutino.

Prefieren una especie de “desorden con orden” y el ayuno intermitente hace sentido para muchos, ya que la mayoría de las personas que cenan tarde no van a tener hambre por la mañana y de esa manera su primera comida del día es el almuerzo.
Y ahí inicia el atractivo por el AI, ya que practicando este método de manera organizada, confirma la teoría que el ayuno es la opción para no tener hambre y perder peso.

Sin embargo utilizar el ayuno como mecanismo cotidiano de pérdida de peso de forma indiscriminada a la larga va a generar lo opuesto a lo que se espera, se activa la reacción de reserva.

  1. ¿Por qué parece funcionar al principio?

Si se trata de personas que tiene un consumo de alimentos de forma desordenada y abundante, este método dietético va a funcionar porque comienzan a ordenar cantidades y horarios diarios de ingesta y ayuno. Pero a la vez al cabo de 90 días la persona ya identifica el ritual como algo normal y posiblemente porque ha tenido resultados pero no han realizado una adopción o integración real, regresan a sus hábitos de siempre. Lo que al inicio era una forma de ritual pasa a ser rutina y ya pierde el efecto.

  1. ¿Es sostenible mantenerse haciendo ayuno intermitente?

Ayunando intermitentemente puede ser una opción que muchos apliquen sin embargo, mantener ayunos prolongados con copiosas ingestas intermitentes va sucediendo lo opuesto, ya no es ayuno intermitente sino ingesta intermitente, no repercutirá en el resultado de pérdida de peso como se espera debido a que el cuerpo registra como una amenaza para lo que se prepara en guardar reservas porque advierte el déficit y lo que en un inicio daba resultados ahora tiene el efecto opuesto de mantener la grasa en reserva.
NO es sostenible, porque los mecanismos que se activan como los ya mencionados van a generar déficits de nutrientes que van generando problemas de salud. Al igual que en general del todo las personas no se someten a un “ayuno” y van acondicionando el método a su entender.

  1. ¿Qué precauciones recomendarías a quienes quieren probarlo?

En realidad considero que si vemos con lógica el periodo de ayuno que se populariza 16:8 las personas podrían comer de forma armónica a sus necesidades nutricionales en horarios más adecuados para su salud en general y de igual manera perderían peso. Sin caer en los desastrosos episodio de ayunos que en realidad no tiene ningún secreto.

Pero si de todas maneras quiere probar asegurese que no tiene riesgo de sufrir ninguna consecuencia que ponga en riesgo su salud y su vida como bajones de azúcar, mareos, debilidad, perdida de orientación, dolores de cabeza, diabetes, hipertension, etc.

Conocer los pro y contras del ayuno intermitente antes de aventurrase y asesorarse con un professional idóneo.


Tener disciplina para llevar a cabo el proceso y la responsabilidad de saber cuando empieza y cuando debe suspender.

Una vez lograda la pérdida de peso progresivamente iniciar la ingesta de alimentos hacia el modelo de alimentación saludable para evitar deficiencias y envejecimiento precoz.
Recuerde que naturalmente es un mecanismo que todos tenemos para preservarnos vivos por un periodo de tiempo pero no abuse porque puede ser arriesgado para algunos.